Sustantivo: También llamado nombre. Varía en género y número. Cumple la función sintáctica de núcleo del sujeto léxico y del objeto directo. Se clasifican en propios (Juan) y comunes (mesa), concretos (piedra) y abstractos (libertad), contables (casa) y no contables (arena), individuales (árbol) y colectivos (arboleda), enumerables (tres libros) y pluralia tantum (tener celos, tener ganas, relaciones públicas), que son los que nunca están en singular, sólo se usan en plural.
Adjetivo: Palabra que cumple la función de complementar al sustantivo (árboles grandes, no tengo la menor idea). Concuerda con éste en género y número.
Artículo: Palabra que limita la extensión del nombre. Tiene carácter átono (no se acentúa) y concuerda con el sustantivo en género y número. Ejemplos: la casa, el jardín, lo lindo, lo importante, las casas, los jardines. Importante: convierte a la función de sustantivo a las palabras que le siguen. Ejemplo: la palabra “rojo”, originalmente un adjetivo, se convierte a la función de sustantivo si se el antepone un artículo: el rojo.
Adverbio: Palabra invariable cuya función consiste en complementar la significación del verbo, de un adjetivo, de otro adverbio, y de ciertas secuencias. Hay adverbios de lugar, como aquí, delante, lejos; de tiempo, como hoy, mientras, nunca; de modo, como bien, despacio, fácilmente; de cantidad o grado, como bastante, mucho, muy; de orden, como primeramente; de afirmación, como sí; de negación, como no; de duda o dubitativos, como acaso; de adición, como además, incluso, también; de exclusión, como exclusive, salvo, tampoco. Algunos pertenecen a varias clases.
Preposición: Palabra invariable que introduce elementos nominales (sustantivos o sus equivalentes) u oraciones subordinadas sustantivas haciéndolos depender de alguna palabra anterior.
Listado: a, ante, bajo, con, contra, de, desde, en, entre, hacia, hasta, para, por, pro, según, sin, sobre, tras
Ejemplo: casa de madera (donde se forma una “frase adjetiva”, ya que “madera”, un sustantivo, pasa a cumplir función de adjetivo por ubicarse luego de la preposición)
Adjetivo: Palabra que cumple la función de complementar al sustantivo (árboles grandes, no tengo la menor idea). Concuerda con éste en género y número.
Artículo: Palabra que limita la extensión del nombre. Tiene carácter átono (no se acentúa) y concuerda con el sustantivo en género y número. Ejemplos: la casa, el jardín, lo lindo, lo importante, las casas, los jardines. Importante: convierte a la función de sustantivo a las palabras que le siguen. Ejemplo: la palabra “rojo”, originalmente un adjetivo, se convierte a la función de sustantivo si se el antepone un artículo: el rojo.
Adverbio: Palabra invariable cuya función consiste en complementar la significación del verbo, de un adjetivo, de otro adverbio, y de ciertas secuencias. Hay adverbios de lugar, como aquí, delante, lejos; de tiempo, como hoy, mientras, nunca; de modo, como bien, despacio, fácilmente; de cantidad o grado, como bastante, mucho, muy; de orden, como primeramente; de afirmación, como sí; de negación, como no; de duda o dubitativos, como acaso; de adición, como además, incluso, también; de exclusión, como exclusive, salvo, tampoco. Algunos pertenecen a varias clases.
Preposición: Palabra invariable que introduce elementos nominales (sustantivos o sus equivalentes) u oraciones subordinadas sustantivas haciéndolos depender de alguna palabra anterior.
Listado: a, ante, bajo, con, contra, de, desde, en, entre, hacia, hasta, para, por, pro, según, sin, sobre, tras
Ejemplo: casa de madera (donde se forma una “frase adjetiva”, ya que “madera”, un sustantivo, pasa a cumplir función de adjetivo por ubicarse luego de la preposición)